EL SISTEMA DE SALUD DE MÉXICO ESTÁ EN DECAIMIENTO...
CADA VEZ MENOS TIENEN ACCESO
Existen muchas razones por las que invertir y donar a una organización sin fines de lucro que ayude a los niños en condiciones de pobreza con necesidades médicas en México es más que una buena idea.
Consideremos por un segundo la narrativa del sistema de salud pública de México. El sistema de salud pública en el México moderno logró su gran avance en la institucionalización en la década de 1940. La Constitución de 1917 introdujo el acceso a los servicios de salud para los trabajadores como uno de sus derechos laborales. Así, para poco más de 355.000 trabajadores, la Seguridad Social se convirtió en una realidad con la creación del IMSS (Instituto Mexicano del Seguro Social) el 19 de enero de 1943. Los primeros pasos para tratar de aumentar su cobertura se dieron en 1973, cuando se reformó la Ley del Seguro Social para permitir que el IMSS extendiera sus beneficios más allá de los trabajadores asalariados y llegara a los grupos de la población sin capacidad contributiva. Como resultado de esta reforma, en 1974 se implementó el “Programa Nacional de Solidaridad Social a través de la Cooperación Comunitaria” y el 25 de mayo de 1979 se firmó un convenio de colaboración entre la COPLAMAR (Coordinación General del Plan Nacional de Zonas Deprimidas y Grupos Marginados) y el IMSS.
El 3 de febrero de 1983 se publicó en el DOF (Diario Oficial de la Federación) un decreto por el que se adicionó el derecho a la protección de la salud para todas las personas. Con esta iniciativa, el Estado mexicano se convirtió en garante de la protección del acceso, en igualdad de condiciones, a los servicios de salud. Así, el 7 de febrero de 1984 se creó la Ley General de Salud (LGS), que regula el derecho a la protección de la salud de todos los mexicanos, establece las bases y modalidades para el acceso a los servicios de salud y la participación de la FEDERACIÓN y sus 32 ESTADOS UNIDOS en materia de salud. Considerando el apoyo prometido por el Banco Mundial (BM) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) para descentralizar la carga financiera de la atención médica a cada gobierno estatal, para 1987 las responsabilidades administrativas se transfirieron sólo a 14 estados. Fue hasta 1997 que todos los gobiernos estatales firmaron los acuerdos del “Acuerdo Nacional para la Descentralización de los Servicios de Salud” hacia la población en general.
Más de tres décadas después de la reforma de salud inicial y debido a la falta de corresponsabilidad en el financiamiento de la salud entre los poderes del Estado y otros factores económicos, el Sistema Nacional de Salud mexicano seguía sin poder garantizar los servicios de salud a los derechohabientes no derechohabientes. Por esta razón, el 15 de mayo de 2003 se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) un decreto por el que se reforman y adicionan la Ley General de Salud (LGS), formalizando la creación del Sistema de Protección Social en Salud, dirigido específicamente a la población en general, que incluye la promoción, prevención, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de la salud. Así, en 2004 inició operaciones bajo el nombre de Seguro Popular. En 2020, el Gobierno Federal mexicano reformó el artículo 4º constitucional que creó el “Sistema de Salud para el Bienestar” (SSB), cuyo propósito es “garantizar la expansión progresiva (tanto cuantitativa como cualitativa), de los servicios de salud para la atención integral y gratuita de la salud de las personas que no tenían acceso a la seguridad social”.
Consideremos por un segundo la narrativa del sistema de salud pública de México. El sistema de salud pública en el México moderno logró su gran avance en la institucionalización en la década de 1940. La Constitución de 1917 introdujo el acceso a los servicios de salud para los trabajadores como uno de sus derechos laborales. Así, para poco más de 355.000 trabajadores, la Seguridad Social se convirtió en una realidad con la creación del IMSS (Instituto Mexicano del Seguro Social) el 19 de enero de 1943. Los primeros pasos para tratar de aumentar su cobertura se dieron en 1973, cuando se reformó la Ley del Seguro Social para permitir que el IMSS extendiera sus beneficios más allá de los trabajadores asalariados y llegara a los grupos de la población sin capacidad contributiva. Como resultado de esta reforma, en 1974 se implementó el “Programa Nacional de Solidaridad Social a través de la Cooperación Comunitaria” y el 25 de mayo de 1979 se firmó un convenio de colaboración entre la COPLAMAR (Coordinación General del Plan Nacional de Zonas Deprimidas y Grupos Marginados) y el IMSS.
El 3 de febrero de 1983 se publicó en el DOF (Diario Oficial de la Federación) un decreto por el que se adicionó el derecho a la protección de la salud para todas las personas. Con esta iniciativa, el Estado mexicano se convirtió en garante de la protección del acceso, en igualdad de condiciones, a los servicios de salud. Así, el 7 de febrero de 1984 se creó la Ley General de Salud (LGS), que regula el derecho a la protección de la salud de todos los mexicanos, establece las bases y modalidades para el acceso a los servicios de salud y la participación de la FEDERACIÓN y sus 32 ESTADOS UNIDOS en materia de salud. Considerando el apoyo prometido por el Banco Mundial (BM) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) para descentralizar la carga financiera de la atención médica a cada gobierno estatal, para 1987 las responsabilidades administrativas se transfirieron sólo a 14 estados. Fue hasta 1997 que todos los gobiernos estatales firmaron los acuerdos del “Acuerdo Nacional para la Descentralización de los Servicios de Salud” hacia la población en general.
Más de tres décadas después de la reforma de salud inicial y debido a la falta de corresponsabilidad en el financiamiento de la salud entre los poderes del Estado y otros factores económicos, el Sistema Nacional de Salud mexicano seguía sin poder garantizar los servicios de salud a los derechohabientes no derechohabientes. Por esta razón, el 15 de mayo de 2003 se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) un decreto por el que se reforman y adicionan la Ley General de Salud (LGS), formalizando la creación del Sistema de Protección Social en Salud, dirigido específicamente a la población en general, que incluye la promoción, prevención, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de la salud. Así, en 2004 inició operaciones bajo el nombre de Seguro Popular. En 2020, el Gobierno Federal mexicano reformó el artículo 4º constitucional que creó el “Sistema de Salud para el Bienestar” (SSB), cuyo propósito es “garantizar la expansión progresiva (tanto cuantitativa como cualitativa), de los servicios de salud para la atención integral y gratuita de la salud de las personas que no tenían acceso a la seguridad social”.
En agosto de 2022 se creó el Instituto Mexicano de Seguridad y Bienestar Social (IMSS-Bienestar) para “brindar a las personas no afiliadas a instituciones de seguridad social, atención médica y hospitalaria integral gratuita con medicamentos y demás insumos asociados, con carácter universal y con base en la equidad, en condiciones que les permitan un acceso progresivo, efectivo, oportuno, de calidad y sin discriminación de ningún tipo”.
El 7 de septiembre de 2022, mediante comunicado oficial en el Diario Oficial de la Federación (DOF), se declaró que “El Seguro Popular no logró una mejora sustancial en los indicadores básicos de salud de la población… considerando los determinantes ambientales y sociales de la salud”. Así, el 29 de mayo de 2023 se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) la reforma a la Ley General de Salud (LGS) para regular el “Sistema de Salud para el Bienestar” y devolver a la Federación la facultad de; organizar, operar, supervisar y evaluar la prestación de los servicios… de las entidades federativas… buscando reducir la heterogeneidad en la prestación de servicios de salud a las personas sin afiliación a la seguridad social.
El 7 de septiembre de 2022, mediante comunicado oficial en el Diario Oficial de la Federación (DOF), se declaró que “El Seguro Popular no logró una mejora sustancial en los indicadores básicos de salud de la población… considerando los determinantes ambientales y sociales de la salud”. Así, el 29 de mayo de 2023 se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) la reforma a la Ley General de Salud (LGS) para regular el “Sistema de Salud para el Bienestar” y devolver a la Federación la facultad de; organizar, operar, supervisar y evaluar la prestación de los servicios… de las entidades federativas… buscando reducir la heterogeneidad en la prestación de servicios de salud a las personas sin afiliación a la seguridad social.
Por ello, la Presidencia de la República analizó el estado actual de los servicios de salud que atienden a la población sin seguridad social, e identificó seis grandes áreas de oportunidad que conforman el eje de atención del actual programa IMSS-BIENESTAR:
1. La segmentación de los servicios de salud.
2. La concentración de sus esfuerzos en la curación y la rehabilitación.
3. El déficit de recursos humanos, financieros, materiales y de infraestructura.
4. La falta de canales de comunicación efectivos entre los profesionales de la salud y los usuarios, así como la erosión de la confianza.
5. Restricciones económicas por gastos catastróficos en la economía del individuo y su familia, la lejanía de los servicios por las condiciones geográficas de quienes viven en zonas de alta marginación y deben recorrer largas distancias para llegar a un centro de salud y por discriminación por edad, idioma o ingresos.
6. La baja calidad y seguridad de los servicios de salud al momento de acceder a atención médica ambulatoria y hospitalaria.
SMA Misiones y Senderos para Cristo mapea las áreas de oportunidad actuales de IMSS-BIENESTAR en los puntos 4 y 5:
Artículo 4
El gobierno mexicano se alineó con la Carta de Ottawa para la Promoción de la Salud, que establece que la promoción de la salud debe incluir la participación efectiva y concreta de la comunidad en el establecimiento de prioridades y la toma de decisiones para lograr un mejor nivel de salud. En apoyo a esta área de oportunidad, brindamos asesoramiento y asistencia a las familias mexicanas para reorientar las creencias y las actividades saludables. Esto proporcionará un vínculo directo con conductas de salud positivas, lo que desencadenará conductas similares entre otros miembros de la comunidad.
Artículo 5
En cuanto a la disponibilidad de servicios de salud de calidad que sean accesibles a quienes los necesitan, responderemos donde exista la necesidad, incluyendo la disponibilidad de personal, la pertinencia cultural de los servicios de salud y las prácticas, valores y una visión realista de la población que requiere los servicios necesarios, ya sea indígena, afromexicana o de otro origen cultural, sin discriminación.
Puedes participar apoyando nuestras campañas o colaborando con nosotros o simplemente haciendo una donación. Hay siete (7) formas de participar.
1. La segmentación de los servicios de salud.
2. La concentración de sus esfuerzos en la curación y la rehabilitación.
3. El déficit de recursos humanos, financieros, materiales y de infraestructura.
4. La falta de canales de comunicación efectivos entre los profesionales de la salud y los usuarios, así como la erosión de la confianza.
5. Restricciones económicas por gastos catastróficos en la economía del individuo y su familia, la lejanía de los servicios por las condiciones geográficas de quienes viven en zonas de alta marginación y deben recorrer largas distancias para llegar a un centro de salud y por discriminación por edad, idioma o ingresos.
6. La baja calidad y seguridad de los servicios de salud al momento de acceder a atención médica ambulatoria y hospitalaria.
SMA Misiones y Senderos para Cristo mapea las áreas de oportunidad actuales de IMSS-BIENESTAR en los puntos 4 y 5:
Artículo 4
El gobierno mexicano se alineó con la Carta de Ottawa para la Promoción de la Salud, que establece que la promoción de la salud debe incluir la participación efectiva y concreta de la comunidad en el establecimiento de prioridades y la toma de decisiones para lograr un mejor nivel de salud. En apoyo a esta área de oportunidad, brindamos asesoramiento y asistencia a las familias mexicanas para reorientar las creencias y las actividades saludables. Esto proporcionará un vínculo directo con conductas de salud positivas, lo que desencadenará conductas similares entre otros miembros de la comunidad.
Artículo 5
En cuanto a la disponibilidad de servicios de salud de calidad que sean accesibles a quienes los necesitan, responderemos donde exista la necesidad, incluyendo la disponibilidad de personal, la pertinencia cultural de los servicios de salud y las prácticas, valores y una visión realista de la población que requiere los servicios necesarios, ya sea indígena, afromexicana o de otro origen cultural, sin discriminación.
Puedes participar apoyando nuestras campañas o colaborando con nosotros o simplemente haciendo una donación. Hay siete (7) formas de participar.
Para mayor información recomendamos consultar:
OECD (2023), Health at a Glance 2023: OECD Indicators, OECD Publishing, Paris,
https://doi.org/10.1787/7a7afb35-en
https://www.dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5714544&fecha=17/01/2024#gsc.tab=0
http://www.imss.gob.mx/prensa/archivo/202301/031#:~:text=Actualmente%2C%20IMSS%2DBienestar%20opera%20en,y%20alrededor%20de%20236%20partos.
OECD (2023), Health at a Glance 2023: OECD Indicators, OECD Publishing, Paris,
https://doi.org/10.1787/7a7afb35-en
https://www.dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5714544&fecha=17/01/2024#gsc.tab=0
http://www.imss.gob.mx/prensa/archivo/202301/031#:~:text=Actualmente%2C%20IMSS%2DBienestar%20opera%20en,y%20alrededor%20de%20236%20partos.